20 de Julio
Es mejor un buen acuerdo que la posibilidad de una gran victoria
Para una victoria, necesitamos un buen pleito, es decir, discutir el asunto, defenderlo, pero en lo que ese refiere a las relaciones humanas, todo esto es complicado.
Podemos tener razon o estar equivocados, pero cada cual defiende su punto de vista, la discusion se alarga y el deterioro provoca alejamiento de unos y otros. A veces es mejor un buen acuerdo que una gran victoria. Podemos desear llegar a conseguir algo y en nuesro camino, nos encontramos con personas y contratiempos que hacen que se tuerce todo. ¿Qué ocurre? que nos frustramos y nos da el bajon oportuno y parece que nunca llegaremos a conseguir nada, que todo esta fuera de nuestro alcance y que no valemos para nada.
Pero tras reflexionar darnos cuenta de que podemos bajar nuestro liston, llegar a un acuerdo con la otra parte, cambiar nuestra meta, o quizas solo baste con cambiar de perspectiva y nuestra meta seguira adelante, pero con pequeños cambios, pequeños altos en el camino, en los que nos provisionares de recursos para negociar, para que ese acuerdo, sea del tipo que sea, sea bueno, en la medida que podamos y no pasa nada por cambiar un poco, por aceptar a los otros en sus demandas. Todo se puede alcanzar cuando las dos partes ponen un poquito de tiempo y espacio para conseguir equilibrar hacia los dos lados.
La batalla desgasta y los conflictos agotan nuestra capacidad emocional, si surge la ira, la ansiedad, la angustia, seguro que las soluciones se ven mucho mas lejanas. Ademas siempre ocurren imprevistos o se presentan adversidades con las que no contabamos, superarlas y afrontarlas es lo que tenemos que hacer para que nuestro bajon por no llegar donde queriamos no ocurra.
Tenemos que aceptar aquello que no podemos controlar, no podemos querer ir por ahi, cambiandolo todo, cada cosa es como es. Solo en aquello que depende directamente de nosotros sera posible el cambio y solo si nos proveemos de recursos para conseguirlo y sobre todo con una cantidad de ellos para los imprevistos que en nuestro camino ocurran, es como si para conseguir algo, tuvieramos que provisionarnos con lo que necesitamos, más un interes, un canon, que servira para apagar el estres cuando aparezcan los contratiempos.
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