Apreciar y cuidar las relaciones

11 de Agosto

Apreciar y cuidar las relaciones

Mantener buenas relaciones tiene un gran impacto en nuestro bienestar emocional. Aquí hay una clarísima relación entre la importancia de nuestras relaciones y el bienestar que disfrutamos. Se ha demostrado que las personas que se sienten más felices tienen algo en común: buenas relaciones sociales.

Es un tópico decir que el ser humano es un ser social, pero es que en realidad es cierto. Digamos que nuestro sistema nervioso está estructurado para que nos conectemos con los demás. En el momento en que eso funciona correctamente y somos capaces de tener relaciones seguras, lo más seguro es que nos sintamos más felices y mejor.

Hay demostraciones de que las emociones se transmiten: sincronizamos el estado de ánimo con las personas que nos rodean y los sentimientos intervienen mutuamente. Se ha demostrado que las relaciones personales no afectan solamente a cómo nos sentimos, sino que también intervienen en nuestras perspectivas.

Un descubrimiento inesperado dice que “las relaciones de segunda mano” también nos afectan: si por ejemplo si un amigo nuestro tiene un amigo que es feliz a nuestro amigo le afecta un 15% y lo increíble es que a nosotros nos afecta un 10% . Los investigadores dicen que la felicidad y el bienestar no lo es a nivel individual, formamos parte de redes en que el bienestar influye en los demás. Pero no sólo ocurre con la felicidad, nos afecta en todos los ámbitos de nuestra vida: el tabaco, si el amigo de nuestro amigo fuma es probable que nuestro amigo también lo haga y en consecuencia, nosotros.

Y lo mismo con los hábitos de vida: si nuestro amigo hace deporte y tiene una dieta equilibrada, la posibilidad de nos afecte se triplicará. Las investigaciones concluyen que nos afectan mucho más las personas con las que convivimos y las amistades que la propia familia.

A parte de la calidad y cantidad de las relaciones es igual de importante el tiempo que pasamos conviviendo con otra gente. Los estudios recomiendan al menos seis horas diarias de contacto social para sentirse bien. Al parecer el contacto en el trabajo es muy importante para el bienestar social.

Resumiendo, nuestro bienestar y el de los demás están íntimamente entrelazados, así que para estar bien tenemos que cuidarnos y también a los demás. Aquí te dejo tres consejos para ver si lo conseguimos:

• Pasar al menos seis horas diarias en contacto con otra gente. No es necesario que el contacto sea personal, también puede ser telefónico o de cualquier otra manera a través de las nuevas tecnologías.
• Reforzar nuestra red social: mantener nuestra relación con la familia, los amigos, vecinos… de manera que poco a poco establezcamos lazos más estrechos.
• Combinar la vida social con el deporte: por ejemplo, caminar mientras hablamos con un amigo, en vez de permanecer sentados. Así también nos “contaminamos” de una vida sana.

Mi felicidad consiste en que sé apreciar lo que tengo y no deseo con exceso lo que no tengo. Leon Tolstoi