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domingo, 5 de mayo de 2013

Controlar las tensiones y el estres

5 de Mayo

Controlar las tensiones y el estres






Las tensiones son parte de nuestra vida desde que somos niños hasta que somos ancianos, y
la adolescencia no es la excepción. Tenemos muchas tensiones en la familia, en la escuela,
en el trabajo, con los y las amigas, con la pareja, etc.
La habilidad para manejar las tensiones nos ayuda a estar más saludable y a disfrutar mejor
de la vida. Esto implica:
1. Reconocer cuáles son nuestras tensiones y qué las provoca. Por ejemplo, puedo saber que
la tensión es familiar, pero lo que me la provoca no es toda la familia, sino que mi padre, madre
o mi pareja o algun otro miembro de la familia son los que no estan deacuerdo conmigo y
porque no toleran que yo no piense cómo ellos y, tal vez, yo no tolero que ellos no piensen
igual que yo.
2. Una vez reconocido esto, es importante analizar distintas alternativas que puedan ayudar
a enfrentar la situación.
3. Si sientes que no puedes con toda la tensión, es necesario solicitar ayuda de la familia, de
los o las amigas o de un/una profesional. El reconocer que se necesita ayuda y pedirla es
parte de esta habilidad tan importante, pues la tensión puede dañarnos mucho.

Las tensiones familiares, laborales, los conflictos que pasan junto a nosotros cada dia, nos provocan estres, a veces se manifiesta en nosotros cambiando nuestra actitud o caracter y haciendo que actuemos de forma impulsiva o no acorde con las situaciones y aunque el estres es bueno porque nos pone en accion, a dosis grandes solo provoca desconcierto y malestar e incluso nos lleva a tener enfermedades fisicas o psiquicas que afectan a nuestra vida diaria.


Las presiones que son extremadamente intensas, que perduran por mucho tiempo, o los problemas que hay que afrontar sin ayuda, pueden ocasionar una sobrecarga de estrés. A continuación mencionamos varias situaciones que pueden ser agobiantes si continúan por largo tiempo:
  • ser víctima de intimidación o estar expuesto a violencia o lesions físicas
  • relaciones tensas, conflictos familiares, la tristeza ocasionada por un corazón quebrantado, o el fallecimiento de un ser querido
  • problemas contínuos en la escuela ocasionados por un problema de aprendizaje o cualquier otro problema como (ADHD) - trastorno de falta de atención por hiperactividad, el cual deja de causar estrés una vez que se reconoce y se trata con el apoyo adecuado.
  • estar siempre apurado, no tener tiempo para descansar y relajarse, y estar siempre en movimiento
Algunas veces el estrés es extremo y necesita atención especial. El trastorno de estrés post-traumático es una reacción muy fuerte que puede producirse en personas que han pasado por una situación extremadamente traumática, como un accidente automovilístico grave, un desastre natural como un terremoto, o una agresión como la violación sexual.
Algunas personas tienen problemas de ansiedad que causan reacciones extremas de estrés, convirtiendo pequeñas dificultades en crisis mayores. Si una persona se siente tensa, enojada o preocupada o tensa con frecuencia, es posible que sufra de ansiedad. Los problemas de ansiedad generalmente necesitan atención, y muchas personas buscan la ayuda de un consejero profesional para superarlos.

Señales de sobrecarga de estrés

Las personas que están pasando por una sobrecarga de estrés muestran algunos de los siguientes síntomas:
  • ansiedad o ataques de pánico
  • constante presión, confusion y apresuramiento
  • irritabilidad y melancolía
  • síntomas físicos: problemas estomacales, dolores de cabeza y dolores de pecho
  • reacciones alérgicas: eczema y asma
  • problemas del sueño
  • beber en exceso, comer en exceso, fumar o usar drogas
  • tristeza o depresión
Todas las personas sienten el estrés de una manera diferente. Algunas personas se enfadan, comportándose de manera poco apropiada y desquitándose con los demás. Otras personas lo esconden y comienzan a padecer de problemas alimentarios o abuso de sustancias ilegales. Las personas que padecen de una enfermedad crónica también notan que los síntomas de su enfermedad se acrecentan cuando tienen una sobrecarga de estrés.

Mantén el estrés bajo control

¿Qué puedes hacer para manejar la sobrecarga de estrés, o mejor aún, eliminarla? El mejor método para hacerle frente al estrés es aprender a manejar el estrés que acompaña cualquier reto; ya sea bueno o malo. El arte de manejar el estrés se va perfeccionando si se usa con regularidad, no solamente cuando se está bajo presión. Saber cómo eliminar el estrés y hacerlo durante situaciones calmadas puede ayudarte a pasar por circumstancias difíciles que puedan surgir. A continuación mencionamos varias sugerencias que ayudan a controlar el estrés:
  • No te sobrecargues con actividades. Si te sientes tenso, piensa en eliminar una o dos actividades, optando por mantener las más importantes.
  • Se realista. No trates de ser perfecto - nadie lo es. Esperar perfección de los demás aumenta el nivel de tu estrés (sin mencionar la presión que ejerce sobre los demás). Si necesitas ayuda con algo, como el trabajo escolar, pídela.
  • Duerme bien. Cuando se duerme la cantidad de horas necesarias, el cuerpo y la mente se mantienen en buen estado, pudiendo manejar cualquier situación negativa que cause estrés. Debido a que el "reloj del sueño" biológico cambia durante la adolescencia, muchos adolescentes prefieren acostarse más tarde en la noche y dormir más tarde en la mañana. Pero si te acuestas tarde y tienes que levantarte temprano para ir a la escuela, no dormirás la cantidad de horas necesarias.
  • Aprende a relajarte. El antídoto natural del cuerpo para el estrés se llama respuesta de relajacion. Es lo opuesto al estrés y crea una sensación de calma y bienestar. Los beneficios químicos de la respuesta de relajacion pueden activarse simplemente relajándote. Puedes provocar la respuesta de relajamiento si aprendes unos simples ejercicios de respiración y los usas cuando estés en una situación que te cause estrés. Asegúrate de mantenerte relajado y de tomar tiempo para disfrutar de actividades que te calmen y sean placenteras: leer un buen libro, tomar tiempo para disfrutar de tu pasatiempo favorito, jugar con tu animalito preferido, o darte un baño relajante.

  • Cuida tu cuerpo. Los expertos están de acuerdo en que ejercitarse con regularidad ayuda a las personas a manejar el estrés. (El ejercicio excesivo o compulsivo puede contribuír al estrés, por lo tanto, debe hacerse con moderación) Aliméntate bien para que tu cuerpo funcione de la mejor forma posible. Cuando sientes estrés, es fácil comer apresuradamente y comer comidas rápidas o que no son nutritivas. Cuando tienes estrés, tu cuerpo necesita más vitaminas y minerales que nunca. Algunas personas usan drogas para escapar de la tensión emocional. Aunque parezca que el alcohol y las drogas alivian la tensión emocional momentáneamente, la realidad es que depender de ellos causa más estrés porque afecta la habilidad natural del cuerpo para recuperarse.
  • Cuida tus pensamientos. Tus perspectivas, actitud y pensamientos influyen mucho en la manera en que percibes las situaciones. ¿Está tu copa medio llena o medio vacía? Una buena dosis de optimismo te ayudará a salir adelante en situaciones difíciles. Aunque no tengas práctica o seas algo pesimista, todos podemos aprender a pensar con más optimismo y disfrutar de los beneficios.
  • Resuelve los problemas sencillos. Aprender a resolver los problemas cotidianos te hace sentir en control. Evitarlos puede hacerte sentir que tienes poco control de la situación, causándote todavía más estrés. Aprende a evaluar la situación con calma, a pensar en las opciones que tienes, y a tomar los pasos necesarios para resolver el problema. Cuando te sientes capaz de resolver problemas pequeños, tendrás la confianza necesaria para resolver problemas más complejos - lo cual te ayudará en situaciones que te causen mucho estrés.

Aumenta tu resistencia

¿Has notado que ciertas personas parecen adaptarse a las circunstancias difíciles sin alterarse? Se mantienen serenos bajo presión y pueden resolver los problemas según van surgiendo. Los investigadores han identificado las cualidades que hacen que ciertas personas posean una resistencia natural aun cuando se enfrentan a circunstancias que producen mucho estrés. Si deseas aumentar tu resistencia, trata de adquirir estas actitudes y comportamientos:
  • Piensa en los cambios como retos normales en tu vida.
  • Reconoce las demoras y las derrotas como un problema momentáneo que puedes resolver.
  • Piensa que tendrás éxito si continúas avanzando hacia tu meta.
  • Resuelve los problemas cuando surjan
  • Establece relaciones firmes y cumple con tus compromisos con tu familia y amistades.
  • Consigue un buen sistema de apoyo y pide ayuda.
  • Participa en actividades para relajarte y divertirte con regularidad
Aprende a pensar que los retos son oportunidades y las situaciones difíciles no son desastres, sino problemas momentáneos. Resuelve los problemas y pide ayuda y consejos de otras personas, en vez de quejarte y permitir que se te acumule el estrés. Fija tus propias metas y mantente al tanto de tu progreso. Toma tiempo para relajarte. Sé optimista. Cree en ti mismo. Respira. Permite que un poquito de estrés te motive a tomar una acción positiva que te ayude a alcanzar tus metas.




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